En un debate sobre el tema en el Parlamento Europeo, la secretaria de Estado portuguesa para Asuntos Europeos, Ana Paula Zacarias, consideró que la retirada de Turquía del convenio "es un asunto grave y supone un paso atrás” en las obligaciones del país de respetar la democracia, el Estado de derecho y los derechos de las mujeres.
"No hay cultura, religión ni tradiciones que puedan servir de disculpa para ignorar la violencia contra las mujeres”, subrayó Zacarias, quien recordó que precisamente Turquía fue el primer país en ratificar el convenio, y ahora es el primero en abandonarlo.
La representante portuguesa, cuyo país preside este semestre el Consejo de la Unión Europea, aseguró además que esta decisión ocurre cuando la violencia contra las mujeres "ha aumentado a niveles inigualables” en todo el mundo debido a la pandemia de covid-19.
Dalli afirmó que la Comisión está comprometida con la causa de combatir la violencia contra las mujeres en la UE y fuera de ella, ya que, advirtió, "cada vez más se oyen voces discrepantes con la importancia y los objetivos del convenio”, tanto fuera como dentro de la Unión.
Los eurodiputados también manifestaron su reprobación a la salida de Turquía del convenio.
Fuente: DW.